jueves, 21 de octubre de 2010

Las Primeras Clases en el Gym

     Chaparrita, ojos grandes...muy grandes, boca formada por dos gruesos y jugosos labios. Cabello rizado y largo, pero sobre todo un par de hermosas y grandiosas nalgas que al compás de la música, que inunda todo el gym, hacen que Bernard le meta más ritmo a las rutinas del cardio. Se observan firmes...duras, a Bernard le han causado una ansiosa obsesión, y hoy, precisamente hoy le ha tocado justo atrás de ella...

-¡¡Abajo!! -ordena el instructor.

     Bernard no puede evitar mantener fija la mirada en ese enorme trasero que con la orden del instructor parece crecer más y más, hasta que de manera accidental y por unos segundos, se muestra una diminuta tanga que causa un fuerte efecto en la entrepierna de Bernard.

     En ese momento, ella vuelve su cabeza hacia atrás más por costumbre que por otra cosa, y se da cuenta de la mirada que Bernard a puesto en su trasero..se da cuenta del bulto que hay en la entrepierna del mirón.
     Al verse descubierto, Bernard sólo atina a desviar su mirada y sonreír...ella se desconcierta y tampoco atina a otra cosa más que sonreír también.

     La clase ha terminado y ambos se dirigen a sus respectivos vestidores, que están uno contiguo al otro.
     Bernard no puede quitarse de la cabeza esa sonrisa y la idea de hacer suyo ese par de enormes nalgas, y mientras se imagina como sería introducirse por atrás de ese monumento, se dá cuenta de que en el vestidor de mujeres sólo queda ella, así que se mete discretamente buscando a su presa...la encuentra dentro de un cubil que tiene la puerta entre abierta. El se asoma un poco y alcanza a mirarla de espaldas en el preciso momento en que sube lentamente su pants cubriendo su expuesto trasero... Bernard entra al cubil, ella sorprendida, intenta gritar, pero al ver que es Bernard desiste, después de todo ella también lo desea...
    Se necesita mucha lubricación para lo que tiene Bernard en mente, así que sin decir palabra alguna la arrodilla de frente a él....ella toca primero ese bulto bajo el pants y comienza a acariciarlo...y el bulto crece y crece cada vez más, hasta que parece que ya no cabe en ese pantalón, entonces ella lo libera bajando lentamente el pants...toma ese caliente pene con sus dos manos y comienza a masturbar sin quitar la vista de los ojos de Bernard...de ves en cuando ella se concentra en acariciar esas venas que recorren el cuerpo del pene de Bernard, causándole a éste un gran placer....introduce la pura "cabecita" a su boca, la rodea con su lengua, la mordisquea delicadamente, la chupa deliciosamente.


Bernard es presa de un extraordinario placer cuando ella vuelve a mirarlo a los ojos con su miembro en la boca, lo vuelve loco mirar esos hermosos, grandes y gruesos labios devorar su pene...ella acaba por introducir casi todo ese pene en su boca en un rico y excitante vaivén...después con su lengua moja completamente esa verga.
     Ella se levanta, sabe lo que quiere Bernard, le da la espalda y lentamente comienza a bajarse el pants.

- ¿Te gusta....? - pregunta a Bernard, quien se encuentra extaciado ante el espectáculo que miran sus ojos.

    Bernard la abraza por la espalda, y besando ésta, baja hasta perderse entre ese par de enormes nalgas...


     Luego introduce poco a poco su hinchado pene, en ese estrecho y apretado orificio, arrancándole un ahogado gemido de placer, el cual ella corresponde con un rico movimiento de cadera que hace estremecer a Bernard. Ella explota de placer y así se lo manifiesta a Bernard haciendo cada vez más violento y frenético sus movimientos...su repiración cada vez más agitada...sus gemidos menos ahogados...
      Ella echa sus brazos hacia atrás, Bernard los toma mientras ella se agacha lo más que puede abriendo un poco más las piernas y curveando su estrecha espalda....así, en esta posición, Bernard tiene la mejor vista que pudo haberse imaginado...por un momento se encuentra hipnotizado observando como entra y sale su pene de ese estrecho ano. La vuelve a tomar por la cintura y sigue embistiendo ahora con más fuerza...sabe que el final está cerca, le propina dos fuertes nalgadas mientras ella grita de placer mientras contrae su ano, apretando de una manera tan deliciosa el pene de él, que lo hace explotar derramando todo su semen dentro de ella....




     Bernard mira la hora y mirando que afuera de los vestidores ya todo es oscuridad, hace una llamada. Ahora todo será cuestión de que alguien pueda venir a darles salida del gym....